Cómoda, discreta, higiénica y segura. Con la copa menstrual casi ni te darás cuenta de que tienes la regla. Un invento, por cierto, que no es de hace poco: las primeras se fabricaron ¡en 1867! Eso sí, nada tenían que ver con las actuales. Fueron necesarios 100 años, la popularización de materiales como el látex y la eliminación de prejuicios para que comenzara a extenderse su uso.
¿Qué es la copa menstrual y qué la hace especial?
Es un pequeño dispositivo que se introduce en la vagina y retiene y almacena el flujo menstrual. No lo absorbe, como hacen los tampones y compresas. Vamos ahora con las ventajas:
- Tiene una gran capacidad, por lo que podrás llevarla sin problemas hasta 12 horas.
- Se puede usar durante años, por supuesto, esterilizándola después de cada uso.
- Es económica. Piensa en lo que gastas al año en compresas y tampones.
- Es cómoda, ya que no se mueve ni se desborda aunque que tu actividad sea intensa.
- El material con el que se hacen las copas es biocompatible y no tiene tóxicos. Recuerda que el uso de tampones se ha asociado a problemas como el síndrome del shock tóxico.
Y, además, la copa vaginal es ecológica. Según algunos estudios una mujer que usa tampones o compresas genera a lo largo de su vida alrededor de 300 kg de residuos. Y no hay que olvidar que en su composición llevan plásticos que tardan siglos en degradarse. Las copas, por el contrario, son reutilizables y apenas generan residuos. ¡Todo son ventajas!
¿Cómo usar la copa vaginal?
Lo primero que debes saber es que se puede usar desde la primera regla y que no tiene contraindicaciones, aunque siempre es bueno consultar con el ginecólogo, sobre todo si sufres alguna enfermedad o molestia en tu zona íntima.
Para empezar a utilizar la copa menstrual, es mejor ir probando poco a poco y sentirse cómoda y segura con ella. Cada mujer es diferente, así que cada una tendrá su tiempo de adaptación a este método.
También es importante que sepas que no hay una talla única. Si no has tenido partos vaginales o eres joven, es mejor utilizar la talla pequeña. Si has dado a luz de forma natural o tienes el suelo pélvico débil, mejor una grande. ¿Cómo saber cuál es mi talla? Fácil. Si se adapta a las paredes vaginales y hace vacío, esa es la tuya.
Ahora sí, vamos a la cuestión práctica: Cómo poner la copa menstrual. Tampoco tiene mayor complicación. Estos son los pasos que debes seguir para colocarla correctamente:
- Dobla ligeramente la copa por los bordes e introdúcela en la vagina.
- Gírala un poco para ajustarla.
- Tira ligeramente de ella y comprueba que hace vacío.
- Para extraerla debes presionar un poco en la base para romper el vacío y tirar suavemente. Y, sobretodo, recuerda limpiarla y esterilizarla después de cada uso.
¿Te animas a probarla? Es cierto que la copa menstrual ha generado opiniones de todo tipo, pero las positivas ganan. ¡Cuéntanos tu experiencia!
Miss Sexydream es la redactora jefa del blog del sex shop Sexydream. Especialista en las artes amatorias, le apasiona la literatura erótica, los masajes con aceite y los preliminares que comienzan con una copa de buen vino.
