El BDSM es una de las prácticas más utilizadas por parejas que quieren salir de la rutina. Sin embargo, aún tiene muchos escépticos. ¿De verdad hay placer en el dolor? ¿Y cómo se llega a esas altas dosis de placer para practicar la dominación sobre un sumiso? Y lo más importante de todo: ¿cómo estar seguro de que está disfrutando del dolor que se le inflige?
¿Hay placer en el dolor?
Sí. Es una línea muy fina la que separa el dolor y el placer, y es que todo gira alrededor de las endorfinas que genera nuestro cuerpo en determinadas situaciones. Cuando una persona se excita, se produce una liberación de endorfinas que, al mismo tiempo, surgen como respuesta al dolor. Por eso, en las relaciones BDSM en las que una persona está excitada y está sufriendo un daño el placer es mayor.
En cambio, es muy importante reseñar que, en las relaciones sexuales, solo cuando el dolor es consentido se puede sentir placer.
¿Cómo escoger los juguetes que se van a utilizar?
Hablando con el sumiso. Aunque a lo largo de la sesión BDSM el sumiso no sepa qué se va a utilizar y qué no, sí debe haber dado su consentimiento previo para la utilización de cada juguete. Por ejemplo, puede vetar el uso de determinados juguetes en las primeras sesiones, o aceptar el uso de cualquier juguete consentido en cualquier momento.
Es decir, lo más importante de las prácticas de sumisión es que haya una comunicación fluida entre el sumiso y el dominante. ¡El dominante nunca podrá traspasar los límites!
Tipos de juguetes para la sumisión
A la hora de elegir los juguetes para sumisión, deberás tener en cuenta las peticiones del sumiso, es decir, qué juguetes tolera y cuáles no quiere probar. Tanto si estáis empezando con sesiones de sumisión y dominación como si sois expertos, deberéis tener en consideración los diferentes tipos de juguetes BDSM que podéis encontrar:
Esposas y cuerdas
Las esposas y cuerdas son los productos típicos del bondage. Tener atado a tu sumiso y que no tenga posibilidad de moverse cuando estás utilizando algún conjunto o complemento sobre su cuerpo puede ser muy excitante para ambos. Si no eres muy mañoso para hacer nudos bondage, podrás elegir esposas para conseguir esa inmovilización. En cambio, si te atreves con este tipo de nudos podrás cambiarlas fácilmente por unas cuerdas para, incluso, atarle a la cama durante la relación sexual. En cualquier caso, hay kits bondage que incluyen todo tipo de juguetes para ataduras.
Mordazas fetish
Las mordazas son un fetiche para muchos amantes del BDSM. Son perfectas para impedir que tu sumiso no diga ni una palabra durante la relación sexual. Si ese es el juego al que queréis jugar, debéis buscar una mordaza que se adapte a lo que estáis buscando. Desde opciones de bola hasta de araña, hay un sinfín de mordazas fetish entre las que podrás elegir en función de lo que estés buscando. Y debéis encontrar un gesto que sustituya la palabra de seguridad.
Aparatos de castidad
Los instrumentos de control de castidad son aparatos que impiden que una persona pueda obtener placer sexual gracias a la estimulación genital. Existen aparatos de castidad tanto para hombres como para mujeres, pero puesto que el fin del BDSM es infligir dolor al sumiso, los más comunes son los cinturones o dispositivos de castidad. Están fabricados en materiales resistentes, como acero inoxidable o policarbonato, para impedir la erección del sumiso. En cambio, sí disponen de pequeños orificios para ventilar y un orificio específico para la orina.
Juguetes sado para dolor y placer
Otros juguetes sado que aportan grandes dosis de dolor y, a la vez, de placer, son los que están diseñados para estimular diferentes partes del cuerpo. Desde ruedas de estimulación con pinchos, para proporcionar sensaciones únicas al sumiso, hasta otros juegos para infligir dolor como látigos sado o pinzas para pezones, que le harán sentir dolor en una de las zonas más sensibles del cuerpo y, por tanto, la sensación de placer será única. Además, también encontrarás en los catálogos de tiendas eróticas online algunos juguetes de electroestimulación, aunque eso es solo para los más experimentados en BDSM.
Miss Sexydream es la redactora jefa del blog del sex shop Sexydream. Especialista en las artes amatorias, le apasiona la literatura erótica, los masajes con aceite y los preliminares que comienzan con una copa de buen vino.
