Hace un tiempo que ciertos vídeos porno llamados Cuckold (literalmente el hombre con mujer adúltera), en los que un extraño tiene sexo frente al «hombre castrado«, una especie de juego de sometimiento y castidad han popularizado estos dispositivos para hombres, aunque estos dispositivos tienen un gran recorrido histórico.
Podríamos remontarnos al sometimiento de las mujeres nobles y su aislamiento para evitar embarazos de terceros o auténticos cinturones de castidad con cerrojo para evitar visitas durante la ausencia del marido. Así también es con numerosos artilugios religiosos, que existían para ambos sexos, que «castigaban» las erecciones con pinchos y similares, maneras de mostificación corporal con ansias de pureza…
No obstante, hoy en día las motivaciones de tipo religioso son minoritarias, y con las pruebas de ADN ponerse un cinturón de castidad solo puede ser explicado por tendencias masoquistas. Y es este el camino que tomaremos en el post de hoy, las motivaciones lúdicas y más eróticas que conocemos.
Juegos de castidad «Cuckold»
Indicados para parejas que jueguen con el BDSM o fantasías de vouyeurismo, manteniendo al «pajarito» encerrado todo el día, castigos puntuales o regulares. En caso del vouyeur que desea ver como su mujer tiene sexo con otras personas sin tener posibilidad de penetrar, aunque lo asociamos a una humillación, no tiene por qué serlo si la pareja acuerda sus prácticas con mutua. Por el otro lado las dóminas suelen tener un lazo erótico y afectivo, en el que el cuckold puede desarrollar un papel destacado, sin ir más allá o ser pareja.
En el BDSM el sumiso fantasea con ver a su dómina con otros hombres, pero no participa en la búsqueda de otros varones. Al hacerlo pondría sus deseos por encima de los de su dómina, a menos que ella se lo ordene el sumiso no hará nada. En el juego de parejas los gustos del sumiso juegan un papel destacado para cumplir todas las fantasías de los componentes.
La práctica no consiste únicamente de evitar la erección y eyaculación del hombre, en ciertos casos el juego es humillación y dominación, en otros casos control mútuo, estimular el deseo para negar la culminación y hacer aumentar la ansiedad y las ganas… Un sumiso que eyacule se convierte en un servidor poco atento, un sumiso al que se mantiene excitado estará mucho más deseoso de servir y complacer.
La mayoría de las mujeres alcanzan mayoritariamente el orgasmo mediante la excitación del clítoris, por ese motivo poner un cinturón de castidad a un sumiso no les supone ningún problema para su sexualidad. El esclavo tiene manos, labios, lengua y juguetes eróticos para complacer a su ama, cuando le sea ordenado, por lo que el pene del sumiso pierde importancia para la sexualidad de la persona dominante. Si quieres saber más sobre dominantes puedes visitar nuestra entrada para escoger dominante.
Si el juego es en pareja, en lugar de hacer un trío el cuckold solo participará para dar placer a su mujer, con la lengua dedos o juguete erótico… Muchas parejas suelen hacer juegos de este estilo intercambiándose para tener sexo con otras personas sin participar, incluso en orgías. El límite lo marcamos los integrantes de la pareja sin más obligación que no causar daño a nadie.
Además esta práctica se puede combinar con pegging strampon y múltiples maneras de llegar al orgasmo.
Restricciones y torturas para le pene (CBT)
CBT (Cock and ball torture en inglés, Tortura de pene y testículos) para ello se pueden utilizar mil artilugios, las manos, zapatos de tacón… Dependiendo del fetiche de cada quien. Hoy nos centramos en la tortura de los genitales masculinos, aunque también pueden aplicarse a los genitales femeninos con pinzas, cuerdas, succionadores de clítoris y penetraciones extremas.
Las sensaciones físicas y psicológicas implican que estas prácticas requieran compañía de confianza y con experiencia para evitar lesiones en una parte tan delicada y vulnerable. Para la persona dominante obtiene placer al infligir dolor en los testículos y el pene, le añade una sensación de control sobre la parte más preciada de su dominado y para el esclavo puede suponer la humillación y/o sumisión completa. Si algunos masoquistas no son sumisos se limitan a disfrutar de la estimulación del dolor. para cualquier hombre los testículos son una parte muy sensible, que reacciona sobre todo a la presión y la manipulación, siendo las caricias y suaves apretones una sensación que puede proporcionar mucho placer.
Es recomendable ir aumentando la intensidad gradualmente para conocer los límites del placer y resistencia de cada persona. Los testículos son una de las zonas más frágiles y se debe jugar con cuidado para evitar roturas o desgarros.
Un ejemplo de juguete para torturas los genitales masculinos podría ser el enforcer, para el pene y los testítulos, castigar los testículos en una variable del ballbusting. O el siguiente con soga y peso para testículos.
Ball Stretcher
Para mantener apretados los testículos existen juguetes que mantienen comprimidos en goma, evitando lesiones y proporcionando placer sin mucho riesgo.
Anillos para el pene
Hay anillos para el pene para mejorar, hacer durar más la erección y retrasar la eyaculación, de todas maneras este tipo de anillas no tiene nada que ver, estas evitarán la erección con un candado que impedirá la retirada para permitir la expansión del miembro viril.
Este otro ejemplo dispone de anillo para el pene, instrumento de tortura para el escroto, y collar para los testículos todo en uno. Estos anillos son para iniciados, no recomendado para parejas novatas.
Plugs uretrales
Dilatar la uretra es una práctica extendida entre la gente que le gusta el CBT (cock and ball torture), pero las sondas uretrales también pueden formar parte de otro tipo de juegos, como los «reconocimientos médicos» o reconocimiento a fondo de la anatomía de la pareja. Las sondas urinarias son pequeños tubos insertados a través de la uretra del pene o vulva.
El “sondeo uretral” o “juego uretral” se utiliza para referirse a esta práctica en un contexto sexual, una parte del BDSM, el juego uretral suele estar relacionado con el fetiche médico.
Este último no solo te permitirá vibrar, además incorpora electricidad para estimular el pene desde dentro
Miss Sexydream es la redactora jefa del blog del sex shop Sexydream. Especialista en las artes amatorias, le apasiona la literatura erótica, los masajes con aceite y los preliminares que comienzan con una copa de buen vino.
